fbpx

No pierdas el ánimo

Cada historia cuenta

no pierdas el animo

Llevábamos un par semanas sin comprar libros. Han sido unas semanas complicadas para todos porque nuestra rutina de un momento a otro cambió.

Las últimas semanas me han servido para reflexionar, para hacer un recuento de las cosas que hemos hecho bien y de las cosas que podrían mejorar.

En un ejercicio de autoevaluación hemos encontrado que existen áreas de oportunidad dentro de nuestro trabajo, debemos mejorar la comunicación con nuestros clientes, además de optimizar los procedimientos internos.

Pese a las complicadas circunstancias no ha faltado el saludo con ánimo y los buenos deseos que nos dicen que las cosas se mejorarán y que todo volverá a la normalidad eventualmente.

De veras espero que todos ustedes se encuentren bien, quiero compartirte ese ánimo de que las cosas mejoraran para todos.

Seguiremos comprando libros es lo que nos gusta, es lo que nos mueve y somos buenos para eso .

Ayudamos y nos sentimos a gusto con esa misión. En dónde te encuentres no pierdas el ánimo.

Comparte
Facebook
Twitter

Ceemos que los libros usados son como un tesoro en las manos de quien los quiere leer

Por eso nos esforzamos tanto, porque también somos lectores, porque apreciamos el gesto de querer que otros aprovechen esas lecturas que nos apasionaron, que nos acompañaron en noches de desvelo, que nos llevaron a mirar el mundo de otra forma.

Cuando tu nos llamas se pone en marcha un engrane interesante, desde la oficina Marily toma la llamada y se entrevista brevemente contigo. Te hace sentir como si hablaras con alguien que conoces de años, programa tu cita y cuando termina se comunica con Gustavo quien acudirá a la cita.

El día de la visita, Gustavo llega puntual, en la camioneta en la que cargará los libros, pulcro, con su uniforme y su herramienta.

Revisará los libros, pagará por ellos y los cargará en la camioneta. Manejará el tiempo que sea necesario para llevarlos consigo a la bodega en donde Luis los recibirá.

Luis le ayudará a bajar los libros de la camioneta, los colocarán sobre bancos de trabajo y en los siguientes días con la ayuda de Alberto y de Emilio decidirán su destino.

Algunos de esos libros se irán a Ferias de libros usados, otros a librerías, algunos más con estudiantes y otros se quedarán temporalmente en los libreros de la bodega porque también nos gusta leer.

Así, hasta que todos los libros encuentren su propio destino.